Ethan Mørkkant
La Luna Oscura y Portador de la Locura
La Luna Oscura y el Portador de la Locura
Ethan Morkkant nació en el corazón de Noxus, hijo de dos altos mandos militares que lo moldearon desde niño para ser un soldado perfecto. Sin elección propia, fue enviado a participar en la guerra entre Noxus y Jonia con el propósito de fortalecer su entrenamiento y probar su valía en combate. Sin embargo, el destino tenía otros planes para él.
Durante el viaje hacia las costas de Jonia, la embarcación en la que viajaba fue atrapada por un remolino oceánico, un fenómeno devastador que hundió el barco en cuestión de minutos. Milagrosamente, Ethan sobrevivió, pero quedó varado en las costas jonias junto a dos compañeros, quienes eventualmente sucumbieron a las duras circunstancias del lugar. Solo y sin recursos, Ethan vagó por el territorio enemigo hasta que fue encontrado por un maestro en las artes espirituales, quien decidió entrenarlo.
Fue en esta tierra lejana donde Ethan conoció a la Entidad de la Oscuridad, una fuerza arcana y peligrosa que encontró en él un espíritu digno de compartir su poder. Sellaron un pacto, y Ethan comenzó a comprender y controlar la oscura magia que ahora corría por sus venas, convirtiéndola en una herramienta para su supervivencia y un arma formidable.
Con el tiempo, Ethan regresó a Noxus. Allí, aceptó una misión en un pequeño pueblo noxiano que lo llevó a conocer a los compañeros que lo acompañarían desde entonces. Su éxito en esta misión atrajo la atención de la Trifarix, en especial de Alisha, quien les ofreció la oportunidad de formar la escuadra elitista n.º 3, siempre y cuando superaran una serie de pruebas diseñadas para los mejores.
En medio de estas pruebas, Noxus fue atacado inesperadamente por el Vacío, un enemigo primordial y devastador. Durante el enfrentamiento, Ethan se lanzó contra uno de los gigantes del Vacío, desatando un acontecimiento que cambiaría su vida para siempre: al enfrentarse a la criatura, experimentó una conexión con el Vacío, absorbiendo al colosal ser en un instante. Aunque logró acabar con la amenaza, la corrupción del Vacío marcó su brazo, dejándole un poder incontrolable y una maldición permanente.
Impresionada por su valentía y destreza, la Trifarix nombró a Ethan como capitán de la primera escuadra elitista n.º 3, consolidando su grupo como una de las fuerzas más respetadas y temidas de Noxus.
En la actualidad, Ethan lucha contra las consecuencias de sus decisiones. Su cuerpo y su alma están al límite. La Entidad de la Oscuridad lo consume poco a poco, mientras que la Serpiente de la Corrupción, nacida de su conexión con ella en el reino del caos, amenaza con devorar lo que queda de su humanidad. Además, ha sellado un pacto con la Locura, convirtiéndose en su portador, todo con el único objetivo de regresar a su tiempo y garantizar la seguridad de sus compañeros.
Ethan sabe que el precio de sus actos puede ser su propia existencia. Pero en su interior, la luz y la oscuridad libran una batalla constante, y su determinación se mantiene firme: si debe sacrificarse para salvar a quienes ama y cumplir con su destino, lo hará sin dudar.